Las bombillas también influyen en el consumo energético
Apagamos la luz cuando salimos de una habitación, desenchufamos todos los electrodomésticos por la noche y aprovechamos al máximo las horas de luz. Sin embargo, en muchas ocasiones se nos olvida que también las bombillas influyen en el gasto energético y, en épocas como el invierno,, en las que utilizamos mucho la luz eléctrica, pueden suponer un gasto extra innecesario.
A continuación, analizaremos los distintos tipos de bombillas así como su consumo:
-Incandescentes: son las más comunes en los hogares. Aunque ya dejaron de fabricarse a finales de 2012, todavía son muchos quienes las conservan en su casa a la espera de retirarlas cuando sean inservibles.
El funcionamiento de estas lámparas se basa en hacer pasar una corriente eléctrica por medio de un filamento de wolframio; este filamento alcanza temperaturas muy elevadas en las que se emiten radiaciones que son visibles para el ojo humano.
Sin embargo, aunque todavía conservemos algunas de estas bombillas en uso, lo más recomendable es sustituirlas ya que solo poseen una vida 1.000 horas y son las de más consumo energético.
-Halógenas: este tipo de lámparas consumen mucha menos energía que las anteriores. Tienen el mismo sistema que las lámparas incandescentes, pasar corriente eléctrica por un filamento, sólo que en su interior contienen un compuesto halógeno, cuya función es evitar que se evapore el wolframio del filamento y se deposite en la ampolla.
Es por ello que la cantidad de horas de vida de estas bombillas ascienden a 2.000 ó 3.000 horas y gastan hasta un 40% menos que las incandescentes.
Además, proporcionan una excelente reproducción cromática, por lo que a menudo sirven para destacar determinados lugares, obras de arte…
-Fluorescentes: son las conocidas por poseer un tubo de vidrio con una pequeña cantidad de gas. La luz se consigue por excitación del gas al someterlo a una descarga eléctrica entre dos electrodos.
Hay tres tipos de fluorescentes en función del diámetro: el T12 de 36 mm de diámetro, el T8 de 28 mm de diámetro y el T5, de 16mm. Este último es el más frecuente y también el más eficiente. Poseen una vida hasta 10 veces superior a la de las incandescentes y consumen un 80% menos de energía.
Una variante de las bombillas fluorescentes son las de bajo consumo que emplean el mismo mecanismo que éstas pero en un tamaño mucho más reducido. Al igual que las fluorescentes tradicionales, duran entre 8 y 10 veces más que las habituales y consumen un 80% menos.
-LEDs: son la tecnología más moderna en lo que a iluminación se refiere ya que son semiconductores (diodo) que transforman la corriente eléctrica en luz.
Poseen la vida útil más elevada, alcanzado las 45.000 horas y consumen un 80% menos que las incandescentes.
Comparativa entre los distintos tipos de lámparas