De acuerdo con la agenda 2030 y con la meta de alcanzar los ODS, desde la Unión Europea se ha empredido un gran esfuerzo por reducir el consumo de combustibles fósiles.
Así la transición energética hacia una sociedad descarbonizada es una auténtica prioridad para los gobiernos de toda Europa. España no es una excepción y puede tener un papel protagonista para que se apruebe la nueva Directiva Europea de Eficiencia Energética de los Edificios (EPDB por sus siglas en inglés) durante la presidencia española de la UE.
La Directiva Europea de Eficiencia Energética de los Edificios (EPDB por sus siglas en inglés) será una herramienta clave para lograr con éxito los objetivos europeos de descarbonización e independencia energética, lo que requerirá una importante reducción de las emisiones contaminantes (55%) y neutralidad climática en 2050.
En este sentido una de las medidas que se recomienda es la sustitución de calderas comunitarias que utilizan combustibles fósiles antes de que sea obligatorio por las normas europeas.
La transformación tiene muchos vectores de acción pero la adecuación de edificios es uno los campos donde mayor foco se está poniendo. Este acondicionamineto pasa tanto por la intervención en la envolvente del edificio, como por la sustitución y mejora de las instalaciones térmicas. La futura EPDB establece que se fomentarán instalaciones de alta eficiencia, cuando sea técnica, funcional y económicamente viable, que proporcionen al mismo tiempo unas buenas condiciones climáticas interiores y de seguridad.
La EPDB también aborda la descarbonización de la calefacción y refrigeración, mediante la introducción de una base jurídica clara para que los Estados miembros establezcan requisitos para los generadores de calor basados en sus emisiones de gases de efecto invernadero o en el tipo de combustible utilizado.
La aprobación por parte del Parlamento Europeo, el pasado mes de marzo, de una directiva sobre eficiencia energética en los edificios, en la que se contempla la eliminación progresiva de los sistemas de calefacción que funcionan con combustibles fósiles entre 2035 y 2040, las instalaciones con calderas de gas y gasóleo están obligadas a renovarse.
En la práctica, esto va a suponer la sustitución de miles de equipos ineficientes para que España pueda cumplir con los compromisos adquiridos en 2030. Conscientes del amplio reto al que se enfrenta el país, desde Enertec recomendamos una sustitución de instalaciones progresiva y sin tener que esperar a la obligatoriedad impuesta por Bruselas.
A partir de 2024, los Estados miembros no ofrecerán ningún incentivo financiero para la instalación de calderas centralizadas que utilicen gas o gasóleo, por ello desde Enertec recomendamos que se planteen, desde ya, soluciones para sustituir la generación por equipos basados en aerotermia o bomba de calor, siempre que sea posible.
En este sentido, no es necesario esperar a 2035 o 2040 para contar con equipos más eficientes y menos contaminantes, ya que ya existe a disposición del usuario tecnologías maduras y profesionales plenamente formados para abordar su instalación.
El ahorro y la sostenibilidad son dos de las principales ventajas que ofrecen la sustitución de las calderas por nuevos sistemas de alto rendimiento y con menores costes de operación.
Por otro lado, en el caso de que esta sustitución no sea posible de manera integral lo que se recomienda son soluciones híbridas, como pueden ser las aplicaciones de agua caliente sanitaria y apoyo a la calefacción, con la máxima inclusión de la bomba de calor y en combinación con calderas de condensación de alto rendimiento.
Otra de la opciones por la que se apuesta en Europa y que desde Enertec recomendamos es el uso de combustibles como el hidrógeno verde, una fuente de energía limpia y renovable que no produce emisiones de CO2, sólo vapor de agua.
En este sentido, ya existen calderas, como las WOLF con tecnología H2-Ready, que permiten incorporar hasta un 20% de hidrógeno en la mezcla con gas natural con las consiguientes reducciones de emisiones en CO2.
Desde Enertec podemos ayudarte a abordar la sustitución de calderas comunitarias que utilizan combustibles fósiles antes de que sea obligatorio por las normas europeas. Nuestro objetivo es facilitar la transición energética mediante el diseño e instalación de sistemas climatización óptimos que aportan un ahorro energético tanto en viviendas unifamiliares o bloques de viviendas como en edificios de oficinas y naves industriales.
Por el ahorro, por la autonomía y por el planeta es el momento de convertir tu vivienda, negocio o comunidad de vecinos en un lugar sostenible.